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Mostrando entradas de 2012

Recordando algo

En diciembre del 2011 estaba manejando en la carretera. Volvía de la boda de una prima. Conmigo venían mi mamá y mi novia. Yo no iba concentrado en el camino, mi mente estaba en otro lugar.  Acababa de recibir una enorme cantidad de dinero. Mi vida estaba en orden. Todo el camino de regreso a casa me la pasé pensando en las cosas que lograría en 2012, las enormes cosas que lograría. Pensaba en mi trabajo, en mi familia, en mi novia; las cosas estaban perfectas, no había nada de qué preocuparse.  Estaba ansioso porque empezara el 2012, iba a ser un año maravilloso. Y ahora estoy en mi cuarto, frente  a mi computadora, totalmente solo. Escucho una canción de Maroon 5 y como un poco de pavo que quedó de la cena de navidad. Pienso lo emocionado que estaba el año pasado.  Y luego llego a la conclusión de que el 2012 fue un total fracaso. No logré absolutamente nada de lo que esperaba.  Mi trabajo se fue a la...

Obsequios para el pequeño El Maestro

La mejor época de todo el año se acerca: Navidad. Amo la navidad: Los regalos, la comida, los regalos, ver a mis seres queridos (y si no se puede pues de perdida a mi familia) y los regalos. Después escribiré algo sobre por qué amo la navidad, pero hoy les proporcionaré la lista de lo que quiero recibir este año; para que vayan ahorrando o lo que tengan que hacer. Sin más preámbulos:          -  Un yo-yo -  Un iPhone 5 porque quiero estar en onda. -  Una bolsa enorme de galletas de animalitos. ¿A quién no le gustan las galletas de animalitos?         -  500 pantalones de mezclilla Levi's. Si no son Levi's o no son 500, pueden comérselos.        -  Otro yo-yo.        -  Una playera que diga “auxilio, una malvada bruja me convirtió en playera”.        -  Una caja de Ariz...

El pobre Apolinar

Como saben (o no), hace dos semanas se casó una prima. Fue algo improvisado ya que su ahora esposo debe ir a trabajar a Canadá y querían ser marido y mujer antes de que se marchara. Nos citaron a las once de la mañana en el registro civil de Coyoacán, fuimos solo la familia cercana.  Mientras esperábamos a que el juez hiciera lo suyo, me senté en una banca. Al poco rato llegó una mujer de cincuenta y tantos años cargando a un bebé. Se sentó junto a mí, parecía estar esperando a alguien. Minutos después llegaron un muchacho y una muchacha de unos veintitantos años. Se veían cansados y angustiados.  Le cedí el asiento a la muchacha y fui a sentarme a una fuente que estaba en el centro del edificio. El muchacho hizo lo mismo. Buenas tardes, me dijo. Le dije hola y le sonreí.   Él tenía el cabello chino esponjado, usaba lentes, era robusto y vestía con ropa un tanto sucia y que le quedaba muy apretada. -¿Qué esperas? ¿Te vas a casar?   preguntó. ...

La cogida que le di a Lorca y la muerte que me merezco por eso.

A las cinco de la tarde. Eran las cinco en punto de la tarde. Un niño se cayó en Ay Caramba a las cinco de la tarde. Una espuerta con una serpiente dentro a las cinco de la tarde. Lo demás era sólo muerte porque veía The Walking Dead a las cinco de la tarde. El viento se llevó mis ganas de vivir a las cinco de la tarde. Y el óxido sembró el terror *turrups* a las cinco de la tarde. Ya luchan los guerreros Z a las cinco de la tarde. Y un muslo de pollo que siempre rechazo porque prefiero las alitas a las cinco de la tarde. Comenzaron los mariachis a las cinco de la tarde. Las campanas de arsénico y el humo que avisaba que había nuevo Papa a las cinco de la tarde. En las esquinas grupos de cinco discutían sobre fracciones como lo pedía el maestro de matemáticas a las cinco de la tarde. ¡Y el toro salía en las latas de Red Bull! a las cinco de la tarde. Cuando el sudor de nieve de limón de la Michoacana fue llegando ...

300

Hace muchas lunas, mi primo me invitó a su fiesta de cumpleaños. Recibí su invitación con la misma actitud de siempre para las fiestas: “Puta madre, qué divertido”. La gran celebración se llevaría a cabo en el Bol Tlalpan y como saben (o no), siempre he sido un asco en el boliche. Como no podía faltar porque (habría chicas sensuales) soy muy buen primo, me puse a ver videos  para no hacer un tremendo osazo. Ese día iba a salir de la escuela e ir felizmente hasta el boliche, sin contratiempos. Salí una hora tarde, me perdí y llovió. Entré al lugar empapado. Ya toda la familia estaba ahí. Por suerte mi mamá, al ver que estaba lloviendo, me llevó cambio de ropa. Qué linda ella. Salí del baño seco y sensual, felicité a mi primo, saludé a todos y me quejé porque había mucha gente. Estuve haciéndome menso como una hora, hasta que me llamaron a jugar. En mi equipo estaban mi primo y sus amigos. En el otro, mis tíos. Nos negamos a jugar con la prote...

Ay cabrón

Hoy, mis queridos amigos, les contaré una historia de horror. Una historia de horror… VERÍDICA. El horror ocurrió hace ya 7 años, en aquella noche oscura y presagiosa. Como saben (o no), en ese tiempo tenía un enorme perro pastor inglés. Era muy agresivo peeeero, estúpidamente cobarde. Se asustaba con los truenos, los ruidos leves, un simple bu. Yo vivía en una casa muy grande de dos pisos. Se dividía en tres departamentos: En el de arriba vivía una tía, en el de abajo mi mamá, mi hermano y yo; en el último, que tenía dos pisos, vivía mi madrina. Ella se había ido de vacaciones y su departamento estaba vacío. En cuanto a mi tía, pues estaba muerta. Y el departamento vacío también. Total que en la casa sólo estábamos mi mamá, mi hermano, el perro y yo. Eran como las 8 de la noche y sacamos a pasear al perro. Todo en orden: orinó por ahí, le ladró a todo lo que se movía, etc.  Regresamos a casa y unos metros antes de llegar a la puerta, el perro no quiso avanz...

El Maestro de parranda

Como saben (o no) hace poco vi la película “Proyect X”; me pareció divertida aún siendo malísima porque soy un hombre sencillo y contradictorio. Por si no la han visto, aquí tienen un resumen: Tres adolescentes socialmente rechazados (ajá, como ustedes) planean hacer la mejor fiesta de todos los tiempos. Música, alcohol, drogas, sexo, de todo. El jolgorio se les sale de control: la casa es destruida, interviene el equipo SWAT y son atacados por un loco con un lanzallamas.  Aún así la fiesta resulta un éxito y los adolescentes se vuelven leyendas. Fin. Cuando terminó pensé “oh vaya, creo que nunca he ido a una fiesta tan loca como esa”. O tal vez sí y estuvo tan loca que ni la recuerdo. En fin, he decidido contarles del reventón más loco al que he asistido. Acomódense en su silla frente al monitor, señoras y señores, que aquí vamos. T odo comenzó en quinto de prepa. En mi salón había una chava a quien llamaremos “fresa babosa”. Aquella mañana estaba sentad...